Según una investigación del medio Ráfaga Chihuahua, sustentada en documentos de la DEA, el alcalde de Chihuahua Capital, Marco Bonilla, estaría vinculado financieramente con el cártel Jalisco Nueva Generación.
La investigación comenzó en 2021, cuando informantes reportaron que colaboradores cercanos al alcalde fueron vistos con operadores financieros del cártel. Esto llevó al Departamento del Tesoro de EE.UU. a revisar cuentas y transacciones de Bonilla y sus allegados.
En 2022, surgieron datos que implicaban a un funcionario de confianza del edil en el manejo de fuertes sumas de dinero, presuntamente para lavado, lo que activó alertas en agencias de inteligencia.
Meses después, las autoridades detectaron una cuenta bancaria en Ámsterdam con más de cinco millones de dólares a nombre de Vanessa Ochoa Mendoza, media hermana del alcalde, lo que reforzó las sospechas.
Con esta información, las autoridades estadounidenses profundizaron en el caso para armar una investigación sólida contra todos los involucrados en esta presunta red financiera ilícita.
Para 2024, el caso ya mostraba una red más amplia de colaboración entre Marco Bonilla y el CJNG, lo que revela el alcance del narcotráfico en la política mexicana.














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